Buses podrían dejar de operar en Bogotá y esto desató todo tipo de reacciones entre los habitantes de la capital.
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Bogotá enfrenta una grave crisis en su sistema de transporte público con la posible liquidación de La Rolita, la empresa distrital con una flota 100% eléctrica. Esta situación no solo afectaría la movilidad de miles de ciudadanos, sino que también pondría en peligro más de 700 empleos formales.
El problema radica en la falta de respaldo jurídico para la operación de La Rolita, una empresa creada en la administración anterior. Aunque sigue funcionando, su continuidad depende de una decisión clave del Concejo de Bogotá.
¿Por qué estos buses podrían dejar de operar en Bogotá?
En 2024, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca anuló el artículo del Plan Distrital de Desarrollo que autorizaba la creación de La Rolita. Según el fallo, la administración anterior no cumplió con todos los requisitos legales para establecer la empresa.
A pesar de este revés, La Rolita sigue operando. Sin embargo, su futuro es incierto porque el Concejo de Bogotá aún no ha ratificado la capacidad de TransMilenio para ser su accionista mayoritario.
Si esta ratificación no ocurre, la empresa tendrá que liquidarse, lo que afectaría a 53.000 usuarios diarios, especialmente en sectores donde otras empresas privadas no han querido operar, como la Unidad Funcional de Perdomo.
¿Qué dice Carlos Fernando Galán acerca de que estos buses dejen de operar?
Ante la crisis, el alcalde Carlos Fernando Galán ha hecho un llamado al Concejo de Bogotá para que apruebe un proyecto de acuerdo que garantice la continuidad de la empresa.
“Bogotá necesita La Rolita. No solo es un servicio de transporte, sino una empresa con un modelo sostenible, incluyente y equitativo”, enfatizó el mandatario.
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Además, el alcalde destacó que La Rolita no solo reduce la contaminación al evitar la emisión de más de 2,6 millones de toneladas de CO₂, sino que también tiene un enfoque social. El 52% de sus trabajadores son mujeres, muchas de ellas madres cabeza de familia y migrantes.
¿Qué pasará con La Rolita?
Para asegurar su continuidad, el Distrito presentará un nuevo proyecto ante el Concejo, esta vez con todos los requisitos legales en orden.
Mientras tanto, la empresa seguirá operando, ya que su estructura legal aún sigue en pie. Sin embargo, si el Concejo no aprueba la ratificación, Bogotá perdería un operador clave para la competencia en el transporte público, dejando sin alternativa a miles de usuarios del sur de la ciudad.
El posible cierre de La Rolita ha generado un fuerte apoyo ciudadano. Bajo el lema #SíALaRolita, trabajadores y usuarios han salido en defensa de la empresa.
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- Auribel Fernández encontró en La Rolita una oportunidad laboral digna, y ahora su esposo también trabaja allí.
- Magdalena Camargo destaca que La Rolita no solo transporta pasajeros, sino que también genera sueños y oportunidades.
La decisión final está en manos del Concejo de Bogotá. Mientras los ciudadanos piden su continuidad, la incertidumbre sigue creciendo. ¿
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